Qué hacer cuando tu perro no te puede acompañar a una aventura específica

Viajar con perro tiene la limitación de no poder acceder a diversos sitios turísticos. Las causas principales son el tiempo (si dispones de tiempo limitado para visitar algún lugar) y, sobre todo, la prohibición de mascotas en determinados lugares. Yo siempre digo que lo que te da la aventura con tu perro es mil veces mejor que cierto museo, reserva o sitio arqueológico, pero hay algunos lugares que no querrás perderte por nada del mundo. Así que a veces no te quedará más remedio que separarte de tu amigo fiel. Unas veces será solo un rato, para ver un yacimiento arqueológico, por ejemplo; otras, será por días, para visitar una isla o una reserva en la que no dejan entrar animales domésticos. Yo he hecho las dos, y no pasa nada por “abandonar” unos días a tu perro. De hecho, creo que es hasta sano en algunas ocasiones, porque cuando viajas con tu buddy estáis juntos 24/7 ¡y no dejas ni un instante de verle el gepeto! Separarse un rato no viene mal. No te preocupes, en exceso (siempre pensarás un poco en él/ella, está claro…), pues estará en buenas manos.

Las opciones que yo he hecho hasta la fecha, y otras que se me ocurren son:

Dejarle al cuidado de un familiar o amigo

Si cuentas con alguien de confianza en tu destino sería lo perfecto. Obviamente el mejor plan. Solo tienes que dejarle comida, darle breves instrucciones y pedirle que le saque cuando pueda. ¡Ya invitarás a ese compadre que se te ha hecho ese favorazo a una cerveza o una cena! En mi experiencia, Coqui se quedó en unos días Montreal en casa de Sam (un amigo que hice por el camino), mientras yo iba a hacer unos exámenes en NY.

Centros de adiestramiento

Nosotros lo tuvimos que hacer cuando íbamos a las Galápagos. En estas maravillosas islas no está permitido acceder con animales domésticos… Nosotros lo tomamos como que Cocaí se iba de campamento! Además, el lugar donde lo dejamos es súper recomendable por si alguien va a volar de Quito a Galápagos y no tiene donde dejar a su perrete esos días. Es un centro de adiestramiento canino que se llama Winsdog Perros Educados. Además de darle de comer y sacarle varias veces al día, tu perro se relacionará y hará amigos perrunos. Y te mandan fotos de cómo se está portando y cómo se encuentra tu perro para que te quedes tranquilo. Es bastante económico, no llega a 10 dólares por día.

Hoteles caninos y similares

Nunca lo he hecho, pero puede ser buena opción si te tienes que ir unos días y no encuentras otra solución. Ventajas: bien cuidado y hará amigos. La mayor desventaja es el precio, que imagino que no será muy barato.

Dejarle con una familia local o un negocio familiar que te inspire confianza

Personalmente creo que es una buena opción cuando conoces a alguien en quien confías. Después de conversar con la gente o almorzar en su restaurante, puede pedirles que cuiden a tu perro mientras visitas un lugar turístico donde no se permiten perros, a cambio de comprar algo en su tienda, comer en su restaurante o dinero. Lo he hecho un par de veces. Por ejemplo, para visitar el sitio arqueológico de Palenque, México (foto de arriba), le pregunté a un restaurante familiar: "por favor, ¿pueden cuidar de mi perrito? Vendré más tarde para el almuerzo". Pero, nuevamente, esta es mi opinión personal. Si consideras que es demasiado arriesgado, no lo hagas. Incluso yo mismo no lo haría si no estuviera seguro.

Agencia de turismo con la que vayas a hacer un tour

Fui a hacer un avistamiento de ballenas en lancha y Cocaí se quedó en la oficina. No olvides dejarle agua y comida.

Dejarle en el coche (un momentito)

Si vas con tu propio coche o has alquilado uno, puedes dejar a tu perro dentro del coche. Sin embargo, si tienes que hacer esto, por favor, usa el sentido común. Si a tu perro le toca esperar en el coche, estaciona en un lugar fresco (nunca bajo el sol, en mitad del verano, etc); deja las ventanillas abiertas para una apropiada ventilación; un cuenco con agua es buena idea también. Intenta no ausentarte demasiado tiempo.

¡De vuelta con papá!